Hay libros que te cuentan una historia y ya, y hay otros que te hacen sentir como si estuvieras viviendo dentro de ellos. La saga Tú de qué vas de David es de esos libros que te atrapan, te sacuden y, cuando lo terminas, te dejan pensando en tu propia vida amorosa.
Desde el principio, la historia se siente súper real. No es el típico romance de película donde todo es perfecto. Aquí hay amor, sí, pero también dudas, errores, ilusiones y ese miedo a exponernos que todos hemos sentido alguna vez. Lo que más me gustó es que el autor no se anda con rodeos: te mete de lleno en sus emociones, en sus pensamientos, en su manera de ver el amor y las relaciones en esta época donde todo parece fugaz y descartable.
Mientras leía, me caché varias veces reflexionando sobre mis propias experiencias. ¿Cuántas veces nos hemos hecho expectativas en una relación que solo existían en nuestra cabeza? ¿Cuántas veces hemos sentido que encontramos a la persona correcta, pero en el momento equivocado? Tú de qué vas pone sobre la mesa esas preguntas sin dar respuestas fáciles, pero sí con mucho sentimiento.
Es un libro que te emociona, te frustra y te hace reír en algunos momentos, pero sobre todo, te hace sentir. Y eso, para mí, es lo que hace que una historia valga la pena. Si te gustan los libros que hablan de amor sin adornos ni clichés, que te hacen pensar en lo bonito (y lo complicado) de enamorarse, este es para ti.
⭐⭐⭐⭐⭐ 5/5